Matt Casey – Socio Fundador

En julio de 2022, Casey obtuvo el veredicto más grande conocido en la historia del condado de Chester, Pensilvania: $18 millones en un caso relacionado con la falta de diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama en una joven mujer.

Durante el juicio más reciente, Casey convenció al jurado de que el personal médico no instó a la mujer, que entonces tenía 22 años, a un examen de diagnóstico después de que se apersonaron en el consultorio más de una vez en el transcurso de varias semanas con quejas de una masa palpable en el lado derecho de su seno. Si se le hubiera realizado el examen, su cáncer se habría diagnosticado antes de que invadiera sus ganglios linfáticos, y habría tenido muchas más posibilidades de curarse. En cambio, debido a un retraso de 9 meses causado por negligencia médica, su esperanza de vida se ha visto reducida considerablemente (lea sobre el caso).

Un vistazo a la larga lista de casos que Casey ha resuelto por cantidades récord proporciona una ventana al éxito de su práctica por lesiones graves.

Incluso durante la pandemia, con los tribunales cerrados durante más de un año, Casey resolvió casos por $29.5 millones, $27 millones, $18.5 millones, $18 millones, $14 millones y $12.2 millones. Y durante el mismo tiempo, resolvió muchos otros casos por valores de siete cifras.

Solo en 2020, Casey resarció $114 millones en diversos casos de lesiones catastróficas. Entre ellos se encontraba un acuerdo de $45.5 millones en un caso de atención crítica en un hospital.

Para Casey, los resultados se basan en victorias legales similares durante los cuatro años anteriores en los que recuperó la asombrosa cantidad de $433 millones.

Algunos ejemplos notables de 2016-2019 incluyen:

• Un acuerdo de $29 millones para un niño que sufrió una lesión cerebral.
• Un acuerdo en un importante caso de seguridad de armas en nombre de las familias de tres personas que murieron a raíz de una venta ilegal de municiones para armas en un Walmart de Pensilvania. (cantidad confidencial)
• Un acuerdo por defecto de producto de $25 millones contra un fabricante de automóviles a favor de un hombre que sufrió una lesión cerebral después de un accidente automovilístico.
• Una indemnización de $22.5 millones por una lesión cerebral causada por la falta de tratamiento de un aneurisma.
• Un acuerdo de $19.5 millones para un bebé con daño neurológico.
• Un acuerdo de $19.5 millones en un caso de defecto de producto que involucró a un hombre lesionado en el trabajo por equipo defectuoso.
• Una indemnización de $19.5 millones para un niño con parálisis cerebral.
• Un acuerdo de $19.3 millones por lesiones neurológicas que ocurrieron durante el parto.
• Una compensación pecuniaria de $19.25 millones en un caso relacionado con meningitis.
• Un acuerdo de $19.25 millones en un caso de negligencia médica que causó la lesión cerebral de un bebé.
• Un acuerdo de $17.5 millones por un derrame cerebral que causó parálisis.
• Una indemnización de $14 millones en un caso relacionado con atención obstétrica negligente.
• Una indemnización de $13 millones por lesiones neurológicas durante el parto.
• Un acuerdo de $12 millones para una mujer que quedó en silla de ruedas como resultado de una infección.
• Un acuerdo de $11 millones en un caso de cáncer.
• Un acuerdo de $10 millones para una anciana que sufrió un derrame cerebral.
• Una indemnización de $9.8 millones en un caso de negligencia médica para un hombre que sufrió una discapacidad visual.

Casey es uno de los pocos abogados en la historia del estado que tiene varios veredictos de jurado de siete y ocho cifras en su haber. Casey ha ganado seis veredictos de ocho cifras en casos de lesiones catastróficas y ha resuelto muchos más por valores de ocho cifras.

La práctica de Casey se especializa en casos que involucran lesiones cerebrales y de la médula espinal. Ha acumulado un récord inigualable de victorias en estos tipos de casos altamente complejos, incluidas resarcimientos recientes de $29 millones, $26.3 millones, $22.9 millones y $20 millones.

En 2019, Casey ganó un veredicto de $40.5 millones en un caso que involucró negligencia médica al como resultado de una lesión cerebral de un bebé. El acuerdo dictamina que la niña lesionada recibirá toda la atención médica libre de costo que necesite por el resto de su vida. .

Sin embargo, el éxito de Casey en los últimos años no es algo fuera de lo común. El ha estado obteniendo resarcimientos a favor de sus clientes desde que se convirtió en abogado.

A fines de 2014, Casey resolvió un caso histórico de “mala fe” y sin precedentes, contra la compañía de seguros más grande de Estados Unidos por $22 millones.

El caso involucró la negativa de la aseguradora a pagar una póliza de $250,000 a un hombre que resultó gravemente herido en un accidente automovilístico en Filadelfia. El acuerdo de septiembre de 2014, que siguió a un veredicto del jurado de $19.1 millones ganado por Casey, es el acuerdo de “mala fe” de seguros más grande en la historia de Pensilvania y que involucra un vehículo motorizado en la nación, según Verdict Search, una editorial líder de veredictos y acuerdos.

Igualmente, Casey ha ganado la atención de los medios nacionales por litigar exitosamente casos civiles contra la Universidad Estatal de Pensilvania a favor de siete víctimas de agresión sexual a manos del ex entrenador de fútbol americano Jerry Sandusky. Casey representó de manera prominente a las Víctimas 2, 3, 7 y 10, al hijo adoptivo de Sandusky, Matt Sandusky, así como a otras víctimas.

Debido a que Ross Feller Casey ha manejado innumerables reclamos de víctimas que cualquier otro bufete de abogados, logró un acuerdo global de $60 millones con Penn State.

Casey también llegó a un acuerdo con Geisinger Health System en el muy publicitado caso de muerte por negligencia médica que involucra a la difunta Jennifer Sidari, la doctora de 26 años del noreste de Pensilvania que murió de un coágulo de sangre en la cabeza cuando estaba lista para embarcarse en una prometedora carrera médica. El acuerdo se produjo después de que los periódicos describieron como Casey había obtenido el triunfo contra el acusado tras días de "testimonio dañino".

Casey también ganó un impresionante veredicto del jurado por daños compensatorios de $85 millones en un caso de responsabilidad de locales de Filadelfia en nombre de Marcus Gustafsson, un estudiante de medicina de la Universidad de Pensilvania de 30 años que se lesionó la médula espinal en una caída de 20 pies a través de un alcantarilla abierta. Casey probó que la compañía que poseía y operaba las alcantarillas en toda la ciudad había recibido un aviso previo de que se iban a quitar las tapas.

Momentos antes de que el jurado anunciará su veredicto, Casey, con la autorización de su cliente, rechazó una oferta de acuerdo de $10 millones hecha por la compañía de seguros AIG. Según Lawyers USA, el resultado fue el mayor veredicto por lesiones personales en los EE. UU. para 2008. El veredicto de este caso de responsabilidad de locales, ha sido el mayor en la historia de Pensilvania y el segundo compensatorio financiero más grande en el estado.

Casey también recuperó $31 millones (como abogado adjunto) en un caso de 2014 que involucró un producto defectuoso que causó parálisis.

Casey obtuvo un veredicto del jurado de $23.1 millones en un caso del condado de Lehigh, Pensilvania, que involucró negligencia médica por parte de una enfermera de atención domiciliaria que no evaluó adecuadamente ni informó oportunamente el catéter infectado de Sharlee Ann Smoyer. La demora condujo a una infección en el torrente sanguíneo que finalmente provocó que a Smoyer, de 55 años, le amputaron ambas piernas por debajo de las rodillas.

Este veredicto de ocho cifras en 2011 estuvo entre los más altos de negligencia médica en el condado de Lehigh y entre los más altos de su tipo en Pensilvania durante la década anterior.

Solo unos meses antes, Casey ganó un veredicto del jurado de $10 millones para un hombre de 63 años que fue diagnosticado erróneamente con ELA o enfermedad de Lou Gehrig. Casey argumentó con éxito que su cliente, Eric Davenport, nunca sufrió la enfermedad neuromuscular fatal y que el diagnóstico erróneo retrasó el tratamiento de su condición real, una compresión de la médula espinal. Davenport, como resultado, quedó permanentemente en silla de ruedas. El veredicto contra un destacado especialista en ALS fue casi el doble del veredicto más grande por negligencia médica en Filadelfia durante todo 2010.

En septiembre de 2013, la Corte Suprema de Pensilvania denegó la apelación final de la defensa y Davenport recuperó el monto total del veredicto del jurado, más los intereses, que ascendieron a más de $11.7 millones.

Así mismo, Casey ganó obtuvo un resarcimiento de $6.4 millones para los hijos de un hombre de Filadelfia que murió como resultado de negligencia médica.

Dos médicos de la sala de emergencias del Temple University Hospital diagnosticaron erróneamente la afección cardíaca de Derrick Harlem como neumonía y lo dieron de alta solo para que muriera de un masivo ataque cardíaco meses después, reportó el jurado. Pronunciado en mayo de 2012, el veredicto representó uno de los más grandes en años en Pensilvania por un caso de negligencia médica que involucra una muerte. El veredicto fue pagado en su totalidad.

En otro caso, Casey obtuvo un acuerdo de $10 millones para la familia de un soldador de 40 años que murió cuando explotó un tanque presurizado en el que estaba trabajando. Luego del segundo día de testimonio en el juicio, el acuerdo alcanzado fue uno de los más grandes jamás vistos en Pensilvania por un caso de responsabilidad por productos defectuosos que involucra una muerte.

Debido a su trayectoria, Casey tiene un historial lleno de éxitos al asumir los casos difíciles con tenacidad y por nunca haber huido de las poderosas entidades a las que se ha enfrentado.

Otro caso a comentar fue cuando Jeffrey Davis murió en la explosión de una refinería de petróleo en Motiva Enterprises en la ciudad de Delaware, Delaware. Casey, como abogado adjunto con otro abogado, lideró el litigio en el caso de muerte por negligencia.

Casey analizó más de 40,000 documentos e investigó más allá de la mirada superficial que habían tomado las agencias estatales y federales al investigar el caso. El esfuerzo reveló que un tanque corroído había filtrado hidrógeno y que este fue la fuente de la explosión. Casey también demostró que Motiva estaba consciente del peligro inminente. Al final, el caso se resolvió por la asombrosa suma de $36.4 millones, lo que lo sitúa a nivel nacional entre los acuerdos, relacionados con una sola víctima, más grandes de la historia por un caso de muerte por negligencia.

Los hallazgos descubiertos por el caso llevaron a la aprobación de una nueva ley de Delaware que rige los tanques de almacenamiento sobre el suelo. También llamó la atención del Philadelphia Magazine, que en 2003 colocó a Casey entre su "It List”, nombrándolo como "El abogado" en Filadelfia que se convertiría en el nombre más sonado de la próxima década.

La revista también destacó el trabajo de Casey en otro caso, en el que él y otro abogado recuperaron $10.5 millones en un caso de responsabilidad por productos defectuosos para la familia de un niño que falleció en una guardería cuando una mesa plegable se derrumbó sobre él en la cafetería de una escuela de Filadelfia.

A través de un análisis intensivo de miles de documentos y docenas de declaraciones, Casey descubrió que Midwest Folding Products estaba al tanto de los problemas de seguridad relacionados con sus mesas plegables. Para que otros niños también pudieran ser advertidos sobre el peligro potencial de las mesas plegables, el acuerdo en el muy publicitado caso Cozzolino no se mantuvo confidencial.

Casey también se desempeñó como abogado adjunto en una sucesión de resultados notables al principio de su carrera. Estos incluyen:

• Un acuerdo de $29.6 millones en el derrumbe del Muelle 34 en Filadelfia, que mató a tres personas e hirió a decenas más.
• Un veredicto de jurado de $19.1 millones en el caso de una mujer que fue atropellada por un vehículo mientras trabajaba en un sitio de construcción al costado de una carretera en Hazleton, Pennsylvania.
• Un acuerdo previo al veredicto de $12.25 millones para un pequeño niño que se cayó de una ventana en un complejo de apartamentos en Filadelfia cuando la pantalla se salió del marco.
• Un acuerdo de $8 millones para un hombre de 23 años lesionado en un accidente laboral.
• Un veredicto de $6.6 millones para la familia de un niño de 8 años que se ahogó en un campamento de verano después de que los socorristas abandonaran su puesto.

Geográficamente, el éxito de Casey incluye victorias en regiones de Pensilvania que no son lugares amistosos para casos de lesiones personales.

Por ejemplo, logró un acuerdo de $1.5 millones en 2004 para la familia de una mujer con problemas de aprendizaje que murió después de dar a luz. Es uno de los acuerdos de negligencia médica más grandes jamás logrados en el condado de Franklin de tendencia conservadora de Pensilvania.

También ese año, Casey ganó un veredicto del jurado de $5.2 millones para una mujer de 76 años que sufrió un derrame cerebral porque los médicos leyeron incorrectamente los resultados de sus pruebas. Fue uno de los veredictos por negligencia médica más grandes en el estado en 2004.

En 2006, Casey ganó un veredicto de jurado de $2.7 millones para la familia de una mujer que murió después de que le perforaron el intestino durante una cirugía electiva. En ese momento, el resultado fue el mayor veredicto por negligencia médica en un caso de muerte en la historia del condado de Lackawanna, Pensilvania.

Casey se graduó magna cum laude y Phi Beta Kappa de la Universidad de Notre Dame. Obtuvo su JD. del Centro de Derecho de la Universidad de Georgetown.

Martindale-Hubbell ha reconocido a Casey con una calificación de AV "Preeminente", la evaluación más alta posible.