Robert Ross – Socio Fundador

Ross ganó un sorprendente veredicto de $44.1 millones en nombre de una mujer de Filadelfia que sufrió una lesión cerebral como resultado de negligencia médica en el Hospital de la Universidad de Pensilvania.

Ross convenció al jurado de que los médicos del hospital no reconocieron la reacción adversa que estaba teniendo Andrea Tate al medicamento anticoagulante Heparina antes de que sufriera una grave hemorragia cerebral. Como resultado, Tate no puede alimentarse, caminar o usar el baño.

El resultado en Tate vs Hospital de la Universidad de Pensilvania fue el veredicto de negligencia médica más grande en Pensilvania en 2016 y más del doble por resarcimientos en el estado durante todo el año anterior, según The Legal Intelligencer.

Ross también llegó a un asombroso acuerdo de $18 millones en nombre de un niño cuyo caso estuvo relacionado con una lesión de nacimiento que le causó discapacidades neurológicas. Antes y durante el juicio con el jurado presente, no hubo ofertas de conciliación en el caso, el cual involucró a varios médicos, una enfermera y un hospital.

Durante las cuatro semanas de testimonio, Ross litigó agresivamente el caso, llamando a una serie de testigos expertos. La lista incluía a un especialista en medicina materno-fetal, un obstetra, un neonatólogo, un neuroradiólogo pediátrico, un neurólogo pediátrico, un planificador de atención de rehabilitación y un economista. También interrogó con éxito a numerosos testigos de la defensa, incluidos tres obstetras, neonatólogos, neurólogos pediátricos, neuroradiólogos, patólogos placentarios y un economista.

Después de los argumentos finales del caso y mientras el jurado deliberaba, Ross recibió y aceptó una oferta de acuerdo de $18 millones.

En julio de 2017, Ross fue contratado por los padres de Mark Sturgis, uno de los cuatro jóvenes asesinados y enterrados en una granja en Solebury, condado de Bucks, en las afueras de Filadelfia. Ross centró su investigación en las circunstancias que rodearon los asesinatos de alto perfil y si otros, además de los acusados, los primos Cosmo DiNardo y Sean Katz, eran civilmente responsables de las muertes (lea más sobre el caso). Ross, en diciembre de 2017, presentó lo que fue la primera demanda civil por homicidio culposo derivada de los asesinatos de alto perfil.

Tan solo en los últimos dos años, Ross ha logrado recuperar más de $100 millones en nombre de clientes individuales.

Ross también ganó un veredicto de jurado de $18.5 millones en un caso de negligencia médica en Pensilvania que involucró a una niña de 6 años. Debido a que los médicos no consultaron oportunamente a un cirujano cardíaco pediátrico, no pudieron extirpar dos tumores benignos en el corazón de la niña. Como resultado, sufrió lesiones neurológicas y se vio obligada a someterse a un trasplante de corazón, lo que redujo considerablemente su esperanza de vida (lea sobre el caso).

Ross también ha construido un largo currículum de exitosos casos relacionados con amputaciones, tanto por negligencia médica como por accidentes.

En una notable victoria en la corte, Ross fue co-abogado en un caso que resultó en un veredicto de $51 millones para un niño de 4 años cuyo pie fue arrancado por una defectuosa escalera mecánica en el metro de Filadelfia.

Luego, en otro caso, durante el contrainterrogatorio de Ross en el juicio de un funcionario clave de SEPTA, logró evidenciar como la agencia de transporte retuvo documentos, manipuló pruebas y obstruyó el proceso legal en el caso. Esas revelaciones llevaron al juez de primera instancia a imponer una citación por desacato de $1 millón a SEPTA (lea sobre el caso).

En otra victoria impresionante, Ross representó a una podóloga cuyo pie fue amputado como resultado de una negligencia médica. La mujer desarrolló una infección en el hospital, que no fue diagnosticada ni tratada a tiempo, resultando en la amputación. Un jurado emitió un veredicto de $20.8 millones en el caso de negligencia médica de Filadelfia.

Entre las muchas otras victorias legales de Ross se encuentran:

• $17.8 millones por una amputación.
• $12.9 millones por una muerte por negligencia que involucró un error de medicación.
• $8.5 millones por lesiones neurológicas resultantes de negligencia médica.
• $8.4 millones por lesiones neurológicas a un recién nacido.
• $7 millones por no diagnosticar y tratar oportunamente un cáncer pediátrico.
• $6 millones por un retraso en el diagnóstico de un tumor canceroso.
• Resarcimiento por muerte por negligencia de $5 millones por un ataque cardíaco sufrido después del alta de una sala de emergencias.
• $4.45 millones de resarcimiento por muerte injustificada por no diagnosticar oportunamente una infección.
• $4.2 millones de resarcimiento por muerte injustificada por no diagnosticar y tratar la sepsis a tiempo.
• Resarcimiento por muerte por negligencia de $4 millones por no diagnosticar y tratar oportunamente un cáncer de colon.

Ross también fue el principal abogado litigante en un caso que resultó en uno de los veredictos por lesiones personales más grandes de la historia en Nueva Jersey. El caso involucró a una inmigrante de El Salvador, que dio a luz en el Centro Médico de Atlantic City y sufrió una gran pérdida de sangre después del parto. La sangre solicitada para una transfusión tardó más de una hora en llegar, lo que resultó en un paro cardíaco y daño cerebral. El jurado otorgó $22 millones en el caso (lea sobre el caso).

Ross también aseguró $8 millones para un trabajador de una fábrica que sufrió una amputación después de quedar atrapado en una máquina alisadora que estaba operando. A través de una extensa investigación, Ross pudo demostrar que el funcionamiento de la máquina había sido modificado al sustraer las piezas de seguridad necesarias, resultando que el hombre quedara atrapado.

Así mismo, Ross ganó atención nacional por un caso relacionado con una alergia al maní que resultó fatal para un niño.

En el caso, Ross argumentó exitosamente que los pediatras y el alergólogo del niño fueron negligentes al no advertir a sus padres sobre la naturaleza potencialmente mortal de su alergia. Además, no ordenaron un EpiPen, lo que podría haber evitado que el niño sufriera un shock anafiláctico y daño cerebral por comer maní.

Un jurado emitió un veredicto de $10 millones en el caso y un mes después, el prestigioso National Law Journal seleccionó a Ross como “Litigante del Mes”.

En otro caso que llegó a los titulares, Ross convenció a un jurado de que un médico le recetó el medicamento equivocado a una mujer que murió de malaria y que su enfermedad no fue diagnosticada ni tratada a tiempo. Se emitió un veredicto de $5.8 millones en el caso.

Ross ha logrado asegurar numerosas indemnizaciones multimillonarias en casos relacionados con lesiones de nacimiento, ayudando a las familias a pagar grandes gastos médicos y de tratamiento para sus hijos.

En uno de esos casos, Ross recobró $12 millones para la familia de un niño que nació con lesiones neurológicas como resultado de un procedimiento prenatal realizado negligentemente.

Ross también recuperó $7 millones para la familia de un niño que nació con parálisis cerebral y otros problemas médicos. Durante el parto, los médicos no reconocieron los signos de sufrimiento fetal y no actuaron lo suficientemente rápido como para realizar una cesárea.

Recientemente, Ross recobró $9.3 millones para una mujer de Filadelfia que quedó paralizada luego de someterse a inyecciones en la columna.

En sus tres décadas como abogado, Ross ha representado a clientes en casi todos los aspectos de la ley sobre lesiones personales, incluidos los casos de responsabilidad local.

Por ejemplo, Ross recuperó $10 millones para la familia de una niña que se ahogó en una piscina.

En su carrera, Ross también se ha asociado con otros abogados para lograr resultados espectaculares:

• Acuerdo de $29.6 millones por el derrumbe del muelle 34 en Filadelfia que mató a tres personas e hirió a docenas más.
• Veredicto de $25 millones en un caso de negligencia médica de una doctora que murió después de un procedimiento rutinario de fertilidad.
• Veredicto de $15 millones para un bebé con síndrome de Down que sufrió una grave lesión después de una mala praxis durante la cirugía.

Por todo su ejemplar recorrido y múltiples acuerdos favorables, en febrero de 2012, el historial de Ross como litigante llamó la atención del South Jersey Journal, que publicó un artículo de portada titulado: "¿Qué hace que Robert Ross esté tan decidido?" en "uno de los bufetes de abogados de lesiones personales más exitosos en el campo". Lea la historia a continuación:

Ross es miembro de varias organizaciones legales prestigiosas, incluido el Colegio Estadounidense de Abogados Litigantes, que limita la membresía a solo el uno por ciento de los abogados en cada estado, y la Academia Internacional de Abogados Litigantes. Este grupo exclusivo está limitado a 500 abogados en todo el país, y Ross es uno de los 56 de Pensilvania.

Como miembro del Comité de Reglas de Procedimiento Civil de la Corte Suprema de Pensilvania, Ross ayudó a revisar y actualizar las Reglas de la Corte bajo las cuales los abogados ejercen en Pensilvania.

Ross se graduó de la Facultad de Derecho de Cornell en 1986 y de Lafayette College en 1983.

Antes de fundar Ross Feller Casey junto con Joel Feller y Matt Casey, Ross fue socio en otras tres firmas de abogados de Filadelfia: Cohen, Shapiro, Polisher, Shiekman y Cohen; Fox Rothschild; y Kline & Spectre.

Ross es miembro de la Asociación de Abogados de Filadelfia, una organización de abogados afroamericanos que proporciona más de $1 millón en servicios legales pro bono a los habitantes de Filadelfia. También es un viejo miembro de la Asociación de Estudiantes de Derecho Afroamericanos de Cornell - en inglés Cornell Black Law Students Association (BLSA) - un grupo que representa a los futuros abogados afroamericanos.

Ross es miembro de los colegios de abogados de Pensilvania, Filadelfia y Nueva Jersey, las Asociaciones de Abogados Litigantes de Filadelfia y Pensilvania, ATLA/NJ y la Asociación de Abogados Litigantes de América.